Ir al contenido principal

Sobre el Estado y la vuelta del revés de Marx

Todos los conceptos políticos adquieren modificaciones semánticas conforme van cambiando los contextos prácticos, entre ellos está, por supuesto, el concepto de Estado. Hay, por otra parte, elementos imprescindibles para hablar de Estado, por ejemplo, la adquisición de un territorio o la escritura. El territorio (por cierto, sentido original del "demos" griego, algo muy interesante) adquirido es la capa basal, e inmediatamente se defiende (corteza, capa cortical) (tesis ya del Político de Platón). Sobre este territorio surge después la propiedad privada, ojo, y no antes, como pensaba Marx; es decir, el Estado no es un conjunto de aparatos de dominación de clase que surgen para proteger a los "propietarios", porque sin Estado no hay sensu stricto propiedad y, por tanto, es anterior lógica y cronológicamente. Otra cosa es que luego el derecho sea usado por los más "fuertes" para codificar sus intereses, y hablemos de aparatos de control estatales. Pero hay que subrayar la anterioridad del Estado respecto de la propiedad y del surgimiento de las clases. Por último, añadir que la explotación es una forma de dominación más.

Sin escritura no hay tampoco Estado, en efecto, porque sin escritura no hay derecho; así, la capa conjuntiva (funciones ejecutivas, legislativas y judiciales, por muy "primitivas" que sean y dependan despóticamente de un Rey, vg) se asienta en una sociedad política sobre un territorio defendido frente a terceros. De esta manera tenemos las tres capas ya en movimiento y, con ellas, el Estado. No hay ninguna concepción teleológica ni milenarista aquí, sino la constatación de que todo Estado tiene esta estructura.

Que la Modernidad ha transformado el concepto de Estado es claro. En la Nación Política, la surgida tras la Revolución francesa, el Rey deja de ser soberano y lo es la Nación ("Viva la Nación"); aparecen los ciudadanos en el Estado y este se recompone de una nueva manera. Pero eso no quiere decir que aparezca la sociedad civil, pues en todo Estado hay vectores ascendentes, es decir, hay tributación/fraude, hay obediencia/desacato, servicio militar/deserción, etc. Esto no debe impedir hablar de Estado en sentido moderno, e incorporar el Mercado o el capitalismo como componentes esenciales suyos. Pero eso tampoco puede hacernos obviar la estructura de triple capa de todos los Estados.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Brevísimo diccionario: Patria. Nación. Estado. Patria.

Nación, Patria, País, Estado. Hay una confusión con estos términos que impide entender nada. La principal labor de la Filosofía es distinguir, aclarar. No confundir o engañar. La Patria es tierra, territorio, suelo. La tierra donde están enterrados padres y abuelos. La Nación siempre refiere a las gentes. En latín, "natio" es "nacimiento"; por eso se habla de "nación de los dientes" o "nación de la oveja". También se habla de nación en sentido étnico (los gitanos hoy en España es la única nación étnica pura), o nación en sentido histórico (los españoles, en el Quijote), y por último, tras la Revolución francesa, se habla de nación política (vinculada ya con el Estado). El Estado a menudo se confunde con el poder. Pero no; es el territorio, con fronteras y con leyes, dentro del cual existe el poder (estructuras de mando y obediencia) y pueden desarrollarse las economías (la economía siempre es economía política, depende de regulaciones o i...

Dos breves apuntes para el 8M

Dos precisiones sobre el 8M. 1) Las mujeres no forman una clase atributiva, sino una clase distributiva (biológica). Por eso hay hombres esclavos y explotados, y mujeres ricas y explotadoras. Corolario: por sí misma la condición sexual no dice nada de la condición social. 2) los sistemas patriarcales o androcéntricos no son fruto del prejuicio ni de la irracionalidad machista, sino de razones materiales, efectivas y reales: cuidado de la prole, embarazos; fuerza muscular del hombre para ciertas funciones, etc. Una vez superadas ciertas condiciones técnicas y económicas pueden ser transformados esos sistemas androcéntricos, como ha pasado y está pasando en países como España, Francia o USA (pero no en Irán o Arabia Saudí).

Sobre el HEROÍSMO

Sobre el HEROÍSMO.  No es un héroe el que ha leído mil libros cómodamente en el sofá, ni el cultureta cinéfilo, ni tampoco el que ha viajado a Tailandia y medio mundo. Ni siquiera el poderoso, ni el que ha conseguido amasar una fortuna. Es un héroe el que siempre dice la verdad. El que nunca se queja y en su lugar vive agradecido. Aguanta los impulsos de la carne y se abstiene de ellos cuando quiere y sin sufrimiento. El que vive sin miedos. El que no entra en cólera, sino que perdona con dulzura y paciencia. El que ayuda sin esperar premios.